ACOSADOR SERIAL DE FAMILIA CLASE ACOMODADA DEL CERRO DE
LAS ROSAS. ESCRIBE: MARCELO CERQUETI,
PADRE DE UNA DE LAS VÍCTIMAS.
Hace
aproximadamente dos años, a finales del año 2010, mi hija María Josefina de 23
años de edad, conoce desgraciadamente a Sebastián Roqué.
Sebastián Roqué,
un hombre de 37 años, frecuentador de la noche, y miembro de una familia de
clase acomoda del Cerro las Rosas.
Este
personaje, que desde hace 12 años tiene problemas con la justicia, de la cual
hoy se encuentra prófugo, goza una gran cantidad de causas judiciales en su
contra, por acosar a decenas de familias cordobesas, con llamados, amenazas de
muerte, insultos, puntazos, incendios.
Sólo con
consultar en la justicia, las computadoras del Sistema de Administración de
Causas judiciales (SAC), arroja que
Sebastian Roqué tienen nada menos que cuarenta causas en su contra.
Todas
iniciadas por ex novias o familiares, amigos, vecinos, de estas ex novias que
cuando deciden dejar al inestable amante, comienzan a padecer su temerario
acoso con acciones de todo tipo que llegan hasta puntazos, incendios,
persecuciones en automóviles y choques.
Incluso, por
varias de estas causas, hace unos años atrás, el acosador Roque fue procesado
por la justicia y encarcelado en la penitenciaria de Bouwer.
Sin embargo
logró fugarse de allí luego que un psiquiatra de control trasnochado decidiese
declararlo “inimputable” y ordenar sur traslado al hospital neuropsiquiátrico
de Oliva, lugar del cual se escapó prácticamente por la puerta para seguir con
su raid de delitos en contra de la mujeres y la sociedad.
SEGUNDA
PARTE
Las causas
penales contra “el acosador” Roque son de todo tipo.
En el caso de
mi hija… se trata de mi única hija.
Sus acosos
duraron unos dos años y le implicaron tratamiento psiquiátrico y psicológico, custodia
policial, encierro permanente, y la pérdida de 27 kilos.
En lo que a mi
respecta, Roqué, una persona que de día
trabaja en una empresa de autos en la ciudad de Buenos Aires pero que
cuando termina su labor se transforma en el mismo "lucifer, llegó a
amenazarme en incendiar el Restaurant “Rancho Grande” del cual mi padre fue el
fundador hace más de cincuenta años.
A pesar que
sus amenazas, hostigamientos, persecusiones, contra mi, mi hija, mi ex mujer,
mi familia y vecinos continúan.
Por eso, como
padre de una de sus victimas, quiero decirles a los televidentes de El
Avispero, que es muy difícil transmitir el daño que Sebastian Roqué ejerce
sobre una hija y su entorno familiar.
De allí mi
deseo de poder sacar a luz el problema social que son los "acosadores
seriales", con el propósito de que alguien cambie las leyes para que de
una vez por todas se pueda prevenir estos flagelantes delitos de los acosadores
seriales.
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